La limpieza facial es la base para conseguir una piel bonita y radiante. Con la limpieza eliminamos la suciedad, las impurezas y el maquillaje para que el resto de la rutina (la crema para el contorno de los ojos, la crema hidratante, el sérum o el aceite) tenga el máximo efecto posible.
- QUÉ ES LA DOBLE LIMPIEZA FACIAL
- BENEFICIOS DE LA DOBLE LIMPIEZA
- ¿CON QUÉ FRECUENCIA DEBES HACER LA DOBLE LIMPIEZA?
- ¿CON QUÉ FRECUENCIA DEBES HACER LA DOBLE LIMPIEZA?
- LA LIMPIEZA FACIAL POR LA MAÑANA Y POR LA NOCHE
- PREGUNTAS FRECUENTES
Pero ¿de verdad la limpieza es tan difícil? Aunque limpiar el rostro pueda parecer bastante simple, la doble limpieza facial es un punto clave a tener en cuenta para limpiar bien la cara, ya que puede cambiarlo todo. Sigue leyendo para descubrir consejos y trucos que te ayudarán a perfeccionar tus rutinas de limpieza por la mañana y por la noche.
QUÉ ES LA DOBLE LIMPIEZA FACIAL
La doble limpieza facial consiste en usar primero un limpiador a base de aceite para eliminar el maquillaje y el protector solar, seguido de un limpiador a base de agua para eliminar impurezas y cualquier residuo restante de la piel.
BENEFICIOS DE LA DOBLE LIMPIEZA
Los beneficios de la doble limpieza incluyen:
Limpieza a fondo: elimina el maquillaje, el protector solar y las impurezas de manera más efectiva que una limpieza simple.
Mejora de la textura de la piel: ayuda a limpiar los poros y a reducir la aparición de puntos negros e imperfecciones.
Mejor absorción: prepara la piel para absorber sueros e hidratantes de manera más efectiva.
Piel equilibrada: mantiene el equilibrio natural de aceites en la piel utilizando limpiadores suaves.
Mayor luminosidad: deja la piel más clara, suave y radiante.
¿CON QUÉ FRECUENCIA DEBES HACER LA DOBLE LIMPIEZA?
Deberías hacer la doble limpieza una vez al día, normalmente por la noche, para limpiar a fondo la piel antes de acostarte. Por la mañana, no uses el limpiador a base de aceite y lávate la cara solo con un limpiador a base de agua o simplemente con agua.
CÓMO HACER UNA RUTINA DE DOBLE LIMPIEZA FACIAL EN 3 PASOS
La limpieza siempre debe formar parte de tu rutina de mañana y de noche, sin importar el tipo de piel que tengas ni el estilo de vida que lleves. Sigue estos sencillos pasos diarios para limpiar tu rostro:
PASO 1: USA UN LIMPIADOR A BASE DE ACEITE
Lávate bien las manos y asegúrate de que estén limpias antes de tocarte el rostro.
Lo primero que debes hacer siempre es eliminar cualquier maquillaje y protector solar. La doble limpieza es una forma muy efectiva de eliminar el maquillaje y la suciedad. Primero, se utiliza un limpiador a base de aceite, bálsamo o leche limpiadora para eliminar el maquillaje, y luego se sigue con un limpiador a base de agua para eliminar cualquier suciedad restante.
Comienza aplicando una pequeña cantidad en tus manos secas. Masajea suavemente el aceite sobre el rostro seco, centrándote en las áreas con maquillaje o impurezas. Luego, añade un poco de agua a las manos y continúa masajeando para emulsionar el aceite, para que se vuelva lechoso. Enjuaga bien con agua tibia y pasa al siguiente paso.
No olvides limpiar también el cuello y la línea de la mandíbula. La suciedad puede acumularse en la piel suave y sensible del cuello y la mandíbula. Con una almohadilla de algodón, limpia la mandíbula y el cuello con movimientos hacia arriba para eliminar la suciedad y ayudar a mantener la piel firme y levantada.
PASO 2: USA UN LIMPIADOR A BASE DE AGUA
La limpieza del rostro puede parecer algo obvio, pero en realidad puede ser bastante complicado. Usa siempre un limpiador suave y no abrasivo sin alcohol cuando te laves la cara. Usa agua tibia, no caliente, ya que el agua caliente puede resecar la piel.
Limpia con una esponja o paño, o con la yema de los dedos limpios. Masajea el limpiador en tu rostro y cuello húmedos, pero no durante demasiado tiempo para evitar que la piel se reseque. Evita frotar la piel, ya que puede causar irritación. Enjuaga siempre bien con agua tibia y seca la piel con pequeños toques, en lugar de frotar, para proteger la piel tanto como sea posible.
Sé delicado con la piel cuando limpies el rostro y el cuello. Siempre evita frotar, ya que puede dañar la capa externa de la piel y causar irritación desagradable.
Asegúrate de usar el limpiador adecuado para tu tipo de piel. Si tienes piel grasa, evita productos de limpieza facial que contengan cera o aceite, ya que solo provocarán que tu piel sea aún más grasosa. Si tienes piel seca, los productos de limpieza facial con humectantes adicionales pueden evitar que se reseque aún más.
Si no estás seguro de qué tipo de piel tienes y quieres saber qué limpiador o exfoliante usar, consulta nuestra guía sobre tipos de piel normal, grasa, seca y mixta para descubrir cuál es tu tipo.
PASO 3: EXFÓLIATE LA PIEL
Al exfoliarte y eliminar las células muertas de la piel, contribuyes a potenciar su brillo. En función del exfoliante que elijas, es posible que no tengas que exfoliarte cada vez que te limpies el rostro. En algunos casos, si utilizas un exfoliante facial con demasiada frecuencia, te arriesgas a que la piel se irrite, así que debes leer las instrucciones atentamente.
Por suerte, Olay tiene una solución suave de uso diario: Olay Cleanse Detox & Luminosidad. Su fórmula con vitamina E y provitamina B5 contiene partículas que se activan por contacto para ayudarte a conseguir ese aspecto fresco y natural que tanto deseas.
PRÓXIMO PASO: HIDRATACIÓN
Después de limpiar la piel, ya está lista para la hidratación. La aplicación de un humectante es una parte esencial en cualquier rutina de cuidado de la piel, ya que ayuda a reponer la humedad perdida y a mantener la piel hidratada.
Dependiendo de tus preferencias y necesidades de la piel, puedes agregar cremas para los ojos, sueros y humectantes a tus rutinas de mañana o noche. Si quieres intensificar la hidratación, puedes elegir una mascarilla facial para una hidratación extra y una piel más suave. Elige una mascarilla que sea la mejor para tu tipo de piel y disfruta de un momento de cuidado personal.
Por la mañana, usa un humectante facial que contenga SPF para ayudar a proteger tu piel de los dañinos rayos UV. Prueba Olay Collagen Peptide con SPF30 para una protección ligera y de rápida absorción.
DDurante la noche, la capacidad de tu piel para repararse es mayor que durante el día. Una crema de noche, quizás una con retinol, es clave para reforzar la recuperación de la piel, pues esta está más receptiva a los ingredientes activos por la noche y, además, contribuye a que tu rostro recupere la humedad perdida, que es mayor mientras duermes.
Obtén más información sobre los beneficios del retinol para sacar el máximo partido de tu crema hidratante durante la noche.
LA LIMPIEZA FACIAL POR LA MAÑANA Y POR LA NOCHE
El momento clave de la limpieza facial debe ser siempre la noche, pues, durante el día, la combinación del maquillaje y la contaminación del aire puede hacer que en tu piel se acumulen grasa y suciedad. Asegúrate de limpiar en profundidad tu piel para prepararla para la siguiente fase: la hidratación.
Las rutinas de limpieza matutinas no necesitan ser tan intensas como las de la noche, ya que la piel no está expuesta a la misma suciedad y contaminación que durante el día. Asegúrate siempre de limpiar tu rostro adecuadamente cada mañana, ya que esto reinicia la piel para que puedas comenzar el día sintiéndote fresco.
PREGUNTAS FRECUENTES
¿En qué orden debes limpiarte el rostro?
¿Qué va primero, el exfoliante o el limpiador? Los pasos del cuidado de la piel pueden generar confusión. Para ayudarte a despejar cualquier duda, aquí tienes el orden que debes seguir en tu rutina de limpieza: lavar, limpiar, exfoliar, tonificar, aplicar una mascarilla facial y aplicar una crema hidratante.
Si sigues este orden, eliminarás la suciedad y las impurezas de tu rostro y podrás conseguir una piel sana y más luminosa.
¿El rostro puede limpiarse todas las noches?
Sí, por supuesto. Realiza una limpieza en profundidad por la noche con un limpiador eficaz y suave para eliminar todo el maquillaje y la suciedad que se puede acumular en tu piel y preparar tu rostro para la crema hidratante.
¿El rostro puede limpiarse solo con agua?
Es posible hacerlo, pero ten en cuenta que el agua sola no puede eliminar la suciedad y las impurezas que se acumulan en la piel durante el día, así que lo mejor es que elijas un limpiador facial eficaz y suave.
Ahora que ya sabes por qué es tan importante la limpieza facial y cómo limpiarte bien la cara, consulta nuestra amplia selección de limpiadores faciales y encuentra el adecuado para tu bonita y radiante piel.